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Aunque pueda parecer lo contrario, dada la hasta ahora nula conflictividad reflejada durante los cinco meses que lleva abierto el proceso de negociación del Convenio Colectivo de la empresa, l@s trabajador@s de VW-NA estamos ante el que puede ser uno de los momentos más cruciales de la historia de la fábrica de Landaben. Nos jugamos el futuro más que nunca. La situación actual y la que tenemos por delante se puede mostrar con la exposición de unos pocos datos:
A 31 de diciembre de 2012 la plantilla total registrada en VW-NA era de 4.386 trabajador@s; con una media de edad de la plantilla de 44,01 años, y un 57% de l@s trabajador@s (2.610 en total) con edades ya entre los 44 y los 60 años; de ese total de trabajador@s 690 han sido declarad@s “apt@s con limitaciones” por el Servicio Médico de la empresa; el servicio de fisioterapia registra 2.103 asistencias; el número de consultas de psicología ha sido de 702, con 86 nuevos casos; se han realizado 900 evacuaciones de trabajador@s por motivos de salud y accidentes.
Estos datos corresponden al año 2012 y han sido extractados de la Memoria Sanitaria que anualmente elabora el Servicio Médico de la empresa, que aun con una buena capa de maquillaje, no puede ocultar una buena parte de la situación real.
Además del constatado deterioro progresivo de la salud de la plantilla, lo primero que tenemos que leer en estos datos, es que de seguir la trayectoria que llevamos, dentro de 5 años la plantilla de VW-NA puede llegar a tener una media de edad entorno a los 50 años (con muchos trabajador@s alrededor de los 54 años). De est@s, un altísimo porcentaje será mano de obra directa, de buzo de trabajo, y much@s de cadena. ¡¡¡Y la gran mayoría con la salud machacada!!!
L@s trabajador@s de VW-NA tenemos pues a la vuelta de la esquina un problema gravísimo. Porque una plantilla así difícilmente va a servir para trabajar como Alemania querrá que se trabaje en Landaben dentro de 5 años. Una plantilla así tampoco serviría para funcionar en las actuales condiciones de trabajo.
VW está acostumbrada a incrementar la productividad de la planta navarra a razón de más de 15 puntos cada 10 años. Como ejemplo de esto se puede exponer que de un ratio de productividad de 65,09 coches por trabajador al año en 2008, se ha pasado a un ratio de 72,5 en 2012, 7 puntos en cuatro años, estando siempre situada la fábrica de Landaben entre las tres factorías del sector de la automoción más productivas a nivel mundial. Esto ya no va a ser posible, al menos de forma como se ha venido trabajando hasta ahora, haciendo soportar todo el peso y los esfuerzos que conllevan los exitosos resultados de la empresa sobre l@s trabajador@s de producción de las cadenas que por razón de edad y salud están objetivamente agotad@s.
Por tanto, las amenazas de deslocalización de producciones que desde la empresa se nos han planteado a l@s trabajador@s hasta ahora como presión (chantaje) cada vez que se ha negociado un convenio, para que cediéramos más derechos aceptando las condiciones de trabajo que nos han machacado la salud (y que CGT jamás ha aceptado por las consecuencias que iban a tener y ahora vemos con claridad), o también como respuesta a una huelga, etc…, van a quedar en la categoría de broma con la que se nos puede venir encima en 4/5 años si no empezamos desde ya mismo a ponerle remedio al asunto. Porque en esa situación, hipotética pero de enorme probabilidad dados los datos objetivos existentes, VW puede llegar a plantear un muy serio problema a la plantilla de Landaben, y con muy pocas salidas favorables, ya que además va a coger a much@s trabajador@s en el peor momento de su vida laboral –por su edad y su deteriorada salud- para tener ese tipo de problemas. Obviamente, este problema repercutirá social y económicamente al conjunto de la sociedad navarra.
Así pues, el Convenio Colectivo que actualmente se está negociando debería contener ya las primeras medidas para afrontar esta situación y minimizar el impacto que pueda tener en unos pocos años. Medidas que se centren en la salud y el empleo como objetivos básicos e irrenunciables, para que l@s trabajador@s de la empresa lleguemos a la madurez en las mejores condiciones para seguir trabajando hasta la edad de prejubilación, y en paralelo para el rejuvenecimiento de la plantilla con la incorporación de nuev@s trabajador@s. Las reclamaciones salariales en este momento no deben estar entre los puntos prioritarios a reivindicar por la plantilla, menos aún en el contexto social de desempleo existente en Navarra donde la prioridad en todas las empresas debe ser el reparto del trabajo existente con la mejora de sus condiciones para proteger la salud.
Con este planteamiento general (y medidas concretas de larga exposición) afrontamos desde CGT la negociación del próximo Convenio Colectivo de VW-NA, esperando que el conjunto de la plantilla entienda y se implique en su defensa. Y esperando igualmente que los poderes políticos de nuestra Comunidad Foral, que tanto subvencionan a la multinacional (con finalidades concretas pero mucho más aún a fondo perdido), también se impliquen para la solución del problema ahora que podemos estar a tiempo, exigiendo a VW las medidas que garanticen con certeza el futuro de la planta. Los beneficios de la fábrica de Landaben dan para eso y para mucho más.
Carlos Couso Chamarro
CGT en VW-NA, S.A.
Artículo publicado en Foro Sindical de la sección de Economía de Diario de Noticias de Navarra, el 28 de febrero de 2013.
